Comentario de Medios / Campañas y contracampañas

A propósito de rayos X en los puertos

Una semana puede ser intensa en términos de campañas en los medios de comunicación. Tal es el caso, para la semana que acaba de concluir, del tema de la posible instalación de Rayos X en los puertos dominicanos. El Listín Diario -a modo de información o noticia- se hizo eco de un espacio pagado, publicado el lunes 22 por una empresa que se dice ser dueña de un contrato para instalar dichos equipos.

El martes 23, el Listín da seguimiento en su sección de economía con declaraciones procedentes del litoral gubernamental, Autoridad Portuaria Dominicana, en que plantea la necesidad de que se cumpla con dicho acuerdo. El argumento de la empresa es enarbolado por el Director de Apordom: es necesario el control del narcotráfico.

Es la campaña.

La contracampaña se inicia el mismo martes con declaraciones de diversos sectores empresariales, tanto importadores como exportadores, usuarios al fin y al cabo de los puertos. Argumento fundamental: los rayos X implican un costo adicional al comercio, un costo que caerá sobre los hombros de las empresas, exportadoras o importadoras. Es inadmisible. Hablan los industriales, los comerciantes, los importadores.... todos a una, como pocas veces se ven unificados estos sectores. Incluso el CONEP, sombrilla general del empresariado, institución a la que los medios guardan un espacio particular...

Es la contracampaña, la cual se ve coronada el jueves -con publicación el viernes- por declaraciones provenientes también de la ribera gubernamental, pero con mucho más "pool" que APORDOM: el Director de Aduanas, Rafael Camilo, indica que mientras ocupe esa cartera ese contrato no será ejecutado. Acepta el argumento de que elevaría los costos, pero su argumento principal es la falta de transparencia, empezando por el hecho de que el contrato fue firmado por las Fuerzas Armadas, entidad a la que no compete el tema del comercio.

La pregunta que queda, al final de esta semana intensa en guerras mediáticas, es si el Director de Apordom tendrá los pantalones suficientes para pelear sus intereses... y la pregunta de Camilo sobre la transparencia le compete: qué diablos tiene que ver APORDOM con la regulación del comercio... ni FFAA ni APORDOM, es probablemente la respuesta. ¿Tiene que ver? Bueno, excepto que haya alguna explicación no comunicada...

O el círculo se cierra o campañas y contracampañas seguirán. En un país faraónico (digo, presidencialista), es probable que el príncipe tenga la última palabra.

Comentario de Medios / Panorama para la industria

Comentario de Medios / Panorama para la industria

No aparece la palabra “industria” en todas las informaciones económicas o políticas. Sin embargo, las industrias se encuentran en un contexto en donde lo político, lo social, el desarrollo institucional, las medidas financieras… le afectan.

Varias notas.

Primero / Siguen en picada las exportaciones y crece el déficit

José Almonte, en artículo publicado en 7Días.Com, señala que República Dominicana terminó el 2009 con un déficit de 6,820 millones de dólares en su comercio con el resto del mundo. Las importaciones totalizaron 12,283 millones, mientras las exportaciones apenas alcanzaron 5,463 millones. En mis palabras (MT): Las exportaciones representaron el 44.5% del valor de las importaciones. Por cada peso importado, exportamos apenas 45 centavos.

Ya el Presidente Leonel Fernández en su discurso del 27 de Febrero lo dejó dicho: la situación de la balanza de pago mejoró porque disminuyó el valor de las importaciones, NO PORQUE CRECIERAN LAS EXPORTACIONES. Puede sonar esperanzador que disminuyan las importaciones, pero no lo es si la otra cara de la moneda, las exportaciones, no crecen.

El caso más grave sigue siendo el de las zonas francas, que cayeron en 13.1%, la caída más pronunciada de los últimos cuatro años.

Con Estados Unidos nos proponemos establecer un récord, ya que el 2009 fue el quinto año consecutivo de balanza comercial negativa, el déficit alcanzó los 1,941 millones de dólares. Este año el panorama pinta similar o más grave, ya que sólo en enero el déficit alcanzó los 282 millones de dólares.

Segundo / El sector farmacéutico

Transparencia y poder de mercado. Roberto Rodríguez-Marchena, director de Perspectiva Ciudadana, escribe un comentario sobre un ejercicio de transparencia en los negocios del Estado, tomando de ejemplo positivo el de PROMESE/CAL, a partir de un estudio hecho para Participación Ciudadana y que incluye a las dependencias y organismos sanitarios estatales (doce). Destaca el comentario que la actual gestión hecha por la doctora Elena Fernández casi ha duplicado la oferta del catálogo de medicamentos al pasar de 327 a 614. En el 2008 las compras alcanzaron los 1,450 millones de pesos, y en el 2009 los 1,047 millones. Cifra significativa y apetitosa.

Asegura Rodríguez-Marchena que el poder de mercado de PROMESE/CAL ha logrado reducir el precio de los medicamentos (pese a la inflación).

“Hecho de extraordinaria importancia pues el gasto en medicamentos representa el 46.2 por ciento de los 3,138 millones de pesos del gasto familiar de bolsillo en salud (ENIGH 2007). Hay que agregar que las familias dominicanas invierten en salud el equivalente al 3 por ciento del PIB, el sector privado empleador el 1.1 por ciento y el Estado el 1.9 por ciento. (Pedro Luis Castellanos, Financiamiento de la Salud”, expresa

Transparencia, poder de mercado, reducción de costo. Es la conclusión del comentario.

Nosotros añadimos una más: oportunidad para la industria farmacéutica nacional.

Tercero / Intenciones y planes

Mi padre solía repetir que “de bien intencionados está lleno el camino del infierno”. Y la verdad que cuando se trata de “rescatar” al sector de las zonas francas sobran intenciones y planes, no sé si “bien”, pero sobran.

El reporte del Listín Diario habla de que el gobierno inició “una cruzada” en pro de la recuperación total del sector zona franca. Paso: convocar a los empresarios para “diseñar un plan”. Fernando Capellán, presidente de ADOZONA, también habla de relanzamiento. Algo sensato planteado por el empresario –y que ha sido sugerido “más de un millón de veces”- es la diversificación del sector, pero eso no depende del gobierno, depende de ellos mismos, los empresarios.

En mi particular opinión, el objetivo de ADOZONA no es más que la modificación de la Ley 8-90 de modo tal que convenga a sus intereses. Propósito legítimo, aunque envuelto en planes e intenciones.

Cuarto / Un estrategia nacional requiere credibilidad y consenso

El Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo está en lo suyo: el diseño de una Estrategia Nacional de Desarrollo para los próximos 20 años.

Sin embargo, esto requiere de dos ejercicios difíciles en este país. El primer ejercicio es el del consenso. Es una dinámica difícil, pero no imposible. La cultura del diálogo ha dado sus frutos, pero también la carencia de voluntad política para cumplir lo acordado ha llevado a un terreno movedizo para el consenso: la falta de credibilidad en las instituciones públicas y en los acuerdos a los que acceden los gobernantes.

Una muestra de esta falta de cumplimiento es que muchas medidas “acordadas” el año pasado en “la mesa del diálogo” de las “fuerzas vivas de la nación” todavía siguen en los papeles. Es más: quizás ya hasta han sido olvidadas por los ministerios responsables de llevarlas a cabo … ¿o me equivoco? Si me equivoco ¡qué bueno!

Quinto/ ¿Control de precios o libertad de mercados? Ambiguo y peligroso

Altagracia Paulino, directora ejecutiva del Instituto Nacional de Protección de los Derechos del Consumidor, Pro Consumidor, planteó que el Instituto Nacional del Azúcar (Inazúcar) fije el precio del dulce para evitar la especulación y el presupuesto familiar de las amas de casa no sea afectado.

Paulino esboza dos argumentos. Primero, que el mercado no soporta el incremento de los precios. Segundo, que el Estado puede fijar márgenes cuando hay monopolio.

¿Control de precios o libertad de mercados? Una pregunta previa: ¿No hay libertad para importación de azúcar?

En el año 1963 el Profesor Juan Bosch tomó una medida similar. Estableció –creo que por Decreto- el precio del azúcar, sus márgenes. El Presidente Leonel Fernández sabe que son tiempos distintos. Las medidas, por lo tanto, han de ser distintas, so pena de que el camino se torne, como entonces, en ambiguo y peligroso.