viernes, junio 21, 2013

Haití / Diferencias y deficiencias

Crisis y oportunidades
Que las diferencias sirvan para superar las deficiencias

Milton Tejada C.

Para muchos puede ser extraño que afirmemos que, como balance, la crisis con Haití originada en torno al tema avícola (prohibición de entrada de pollos y huevos procedentes de República Dominicana a territorio haitiano)es positiva. Constituye una oportunidad que no debemos dejar aprovechar.
Dos actores desde ámbitos distintos coinciden con esta apreciación: el Director Ejecutivo del Consejo Nacional de Competitividad (CNC) y el Centro Bonó.

Fortalecer las relaciones
El Centro Bonóconsideró propicia la coyuntura para fortalecer mecanismos institucionales que mejoren las relaciones binacionales. “Lo que sucedido en estos catorce días evidencia la inoperancia de la Comisión Mixta Bilateral, la fragilidad de los mecanismos diplomáticos, la ausencia de acuerdos comerciales y la falta de reglas y políticas claras que regulen las relaciones entre ambos países”, indica la institución en una nota hecha llegar a los medios de comunicación.
En lo comercial, Bonó destaca la importancia del intercambio entre ambos países que se estima en US$1,500 millones al año, según los datos ofrecidos por el gobierno. La exportación de huevos y pollos representa alrededor de un 5% de dicho intercambio,  siendo menos significativa que las exportaciones de harina de trigo, varillas de acero, cemento gris, aceite de soya, galletas, cajas de cartón corrugado, barras de hierro o acero forjadas, fundas plásticas, fertilizante, detergente en polvo y preformas  plásticas para botellas.Es decir, gran parte del sector industrial dominicano se beneficia de este intercambio, sin mencionar la presencia de importantes empresas de la construcción en territorio haitiano.
El Centro Bonó propone que se realice un acuerdo formal con el gobierno haitiano en materia comercial, junto a otras medidas como la modernización de los puertos fronterizos, la institucionalización eficiente de estos puertos, la clarificación de las canales de comunicación diplomática y la puesta en funcionamiento de la Comisión Mixta Bilateral.

Las exportaciones, un sofisma
En un artículo publicado en el periódico El Día, Andrés Van Der Horst, a quien se le considera un aliado del sector empresarial dominicano, especialmente de la industria y el turismo, no considera factible un acuerdo comercial en estos momentos. Incluso parece reprochar a los empresarios dominicanos su constante negativa a nuevos acuerdos y pone de ejemplo a Colombia. “De hecho, ante cualquier intento de apertura hacia otro acuerdo de libre comercio el sector privado ha dicho que hasta que no se aumenten los niveles de competitividad la RD no debería sostener ningún acuerdo de libre comercio con otra nación, a menos que no sea con Haití”, parece quejarse el funcionario.
  
Su reproche parece decir: entiendan la posición haitiana de querer acceder, en pleno siglo XXI, al modelo de sustitución de importaciones. ¿Quieren los haitianos transitar por este modelo? Van Der Horst asume que es así y considera que el empresariado dominicano debería abocarse a participar activamente en el proceso de industrialización de Haití, desde adentro.
Señala que la actitud haitiana de proteger su mercado interno “no es un pecado”.  “Están dispuestos a cualquier argumento para protegerse y cerrar el paso a productos más competitivos, así como lo hicimos nosotros de los años 60 hasta los 80, cuando noqueríamos abrir nuestras fronteras a nadie”, remarca recordando la historia de nuestra industrialización.
Es en esta lógica que el Director del CNC señala que “si queremos ser parte del pastel de Haití y de su crecimiento, entonces seamos proactivos, y en vez de pensar en el sofisma de las exportaciones, pensemos en internacionalizar nuestras empresas abriendo plantas en ese país”.
Un el último párrafo Van Der Horst lanza un agudo señalamiento que deberá aclarar en su momento (excepto que lo haya hecho con el sólo afán de provocar). Expresa: “Así generamos empleos que no tendrán que venir a nuestras esquinas a mendigar, movemos el capital de paraísos fiscales o renta fija hacia valores productivos, y ayudamos a mejorar sus condiciones de vida a la vez que generamos riquezas, y, sobre todo,fortalecemos su institucionalidad, para que algún día, y ojala no tome 3 décadas, podamos pensar en un TLC con Haití”.
Quizás no viene al caso, pero pregunto… de qué capitales y a cuáles paraísos fiscales se refiere?

En lo particular creo, como afirma un amigo sociólogo, que las diferencias deben empujarnos a superar las deficiencias.

martes, junio 04, 2013

GCPareto / Cultura de la leña y el fogón



Pobreza
La pobreza se cocina en fogón y leña en el Sur de RD

Este reporte escrito por María Teresa Morel y publicado en El Caribe, el 31 de mayo pasado, recoge los resultados de una investigación del Grupo de Consultoría Pareto para Sur Futuro en torno a las prácticas culturales relacionadas con la cocción de alimentos en una subzona del Sur de República Dominicana. La investigación fue hecha por Milton Tejada y Ana Julia Rodríguez.



La cultura de la leña y el fogón sobrevive en varias comunidades del Sur del país, en donde por décadas sus habitantes han cargado con resignación el peso de la pobreza. Según los datos del IX Censo Nacional de Población y Familia, el 8.29% de los hogares a nivel nacional todavía utiliza leña como combustible para cocer sus alimentos, siendo Azua y Bahoruco las dos provincias en donde más prevalece esta práctica.



Partiendo de estos datos, la Fundación Sur Futuro y la Alianza en Energía y Ambiente con Centroamérica (AEA) realizaron el estudio “La Cultura de Cocción en Comunidades del Sur de República Dominicana”, con el objetivo de conocer a fondo esta realidad y auspiciar el uso de estufas eficientes que contribuyan con el medio ambiente y mejoren la calidad de vida de sus habitantes.



Según el estudio realizado por el Grupo de Consultoría Pareto, en las comunidades de la cuenca de la presa de Sabana Yegua (Los Auqueyes, Las Cañitas, el Tetero, El Gramazo, Los Fríos, Las Cuevas y Montancito) del municipio Padre Las Casas, Azua, ocho de cada diez hogares utiliza leña para preparar los alimentos.



La encuesta, que también incluyó la comunidad de Higo de la Cruz, en la Sierra de Bahoruco, arrojó que el modelo de fogón más usado (45%) es el de tres piedras en el suelo o de fuego abierto, ubicado generalmente fuera de las casas.



Cocinar agachadas



Los investigadores notaron que estos fogones resultan incómodos para las mujeres que pasan mucho tiempo agachadas para lidiar con los alimentos.

Esta situación provoca que las usuarias padezcan de dolores musculares, principalmente en la cadera, puesto que emplean más de cuatro horas en el proceso de cocción de los alimentos.



Otras afecciones identificadas con el uso de leña están relacionadas con irritación en los ojos, enfermedades respiratorias y exposición al calor.

Aunque en más de la mitad de los hogares (55%) cuentan con estufas de Gas Licuado de Petróleo, las amas de casa consultadas admiten que no la utilizan con frecuencia, principalmente por razones económicas.



Las estufas de GLP se utilizan principalmente para la elaboración de alimentos sencillos, como colar café y preparar alimentos para los niños; en caso de enfermedad o en época de lluvias.



Y es que la búsqueda de leña está arraigada en el quehacer cotidiano de casi todos los miembros de las familias de esta deprimida zona del país.

Las mujeres entrevistadas afirman que su uso no representa costo alguno e insisten en que su recolección  no afecta el medio ambiente.



Alimentación deficiente



Otro aspecto interesante del estudio resalta los deficientes hábitos de alimentación, basada principalmente en carbohidratos y pobre en proteínas animales.



Víveres como yuca, auyama y batata; espaguetis, arroz, habichuelas, guandules y harina de maíz es lo más consumido en los desayunos, comidas y cenas. La dinámica productiva de las familias marca en muchas ocasiones los horarios para cocinar y lo que se come. Casi en el 40% de los hogares se cocina dos veces o menos al día.



Sur Futuro donará 1,995 estufas



La gerente de Educación de la Fundación Sur Futuro, Susana Doñé, dijo a elCaribe que con los datos recolectados en el estudio, la institución que preside Melba Segura de Grullón, busca donar 1,995 estufas a igual número de familias a través del programa Sur Solar. “Será una contribución directa en ahorro de energía y al mismo tiempo contribuirá a la conservación de los recursos naturales, porque las personas utilizarían menos energía para cocer los alimentos”.



En ese sentido, indicó que actualmente la institución está diseñando un modelo de estufa adaptada a las preferencias de las usuarias, que limite el tiempo de cocción, la producción de humo y las afecciones de salud, lo que se traducirá en una mejor calidad de vida en la zona.



Economía

Pese a la incomodidad que representa el uso del fogón, las mujeres lo prefieren por razones económicas y prácticas.