sábado, diciembre 17, 2016

Transparencia, rendición de cuentas y legitimidad



Transparencia y rendición de cuentas en las OSC en República Dominicana

Milton Tejada C.

Resumen de las palabras que presentamos en el encuentro organizado por la Asociación Cibao de Ahorros y Préstamos el pasado 29 de Noviembre con Organizaciones No Gubernamentales de la Región Norte. Nuestro agradecimiento a los directivos de la ACAP.

Transparencia, rendición de cuentas y respeto a los públicos a los que se deben las OSC es cuestión de ética, es cuestión de conveniencia y es cuestión de supervivencia.

 La contribución de la sociedad civil en el éxito de los procesos económicos, políticos y sociales del país ha sido clave. En República Dominicana, las OSC han estado presentes como organizadoras y movilizadoras en la investigación y evaluación de
Parte del público asistente.
situaciones, en el diálogo político e institucional, en la defensa del medio ambiente y su sostenibilidad, en el servicio en diversas áreas (salud, educación, defensoría de derechos) a las poblaciones más vulnerables, en la defensa de los derechos de minorías, en la lucha por la igualdad de género, en la articulación de la participación ciudadana… es decir, en cada tema o espacio en donde la constitución de ciudadanía se ha revelado como fundamental para el logro de los objetivos del desarrollo sostenible, las OSC están presentes.

Esto es reconocido, por ejemplo, en los informes de avance de la Estrategia Nacional de Desarrollo, 2013 y 2014, que contienen una larga lista de acciones y procesos en los que han participado OSC por sí solas o junto a instituciones gubernamentales.

La participación ciudadana es un detonante de los cambios y transformaciones sociales.  Por lo tanto, la excusa de muchos ciudadanos de que no encuentran una organización social  que “valga la pena” es eso, una excusa para el compromiso.

Durante mi exposición.
Sin embargo, las OSC necesitan hacer un alto y reflexionar sobre sus propias prácticas y sus responsabilidades, sobre los puntos que dificultan su accionar como actores del desarrollo.

Martha Smith, especialista en filantropía y responsabilidad social y consejera de fundaciones como Wal-Mart y BBVA Bancomer, señaló que en cualquier país el desarrollo de una nación depende en gran parte de la fortaleza de su sociedad civil organizada.

La transparencia y la carencia de fondos para realizar su trabajo son hoy los principales retos de las Asociaciones sin Fines de Lucro en República Dominicana.

La transparencia adquiere un valor fundamental porque está vinculada a la credibilidad, a la confianza que merecen por parte de la ciudadanía y de otros actores con los cuales interactúan las ONGs.

En definitiva, la transparencia es también un tema de legitimidad. Es por esta razón que vale la pena preguntarse si desde este sector hay esfuerzos por ellas mismas para mostrar prácticas de transparencia en sus ejecutorias presupuestaria.

Ejercicios de rendición de cuentas

Hay diversos canales en que, de un modo u otro, las OSC rinden cuenta. Varios de ellos están vinculados a lo estatal.

Junto a Sarah Julia Jorge, también exponente en el seminario.


Un ejemplo. Alianza ONG ha publicado tres  informes colectivos  de rendición de cuentas. En el primero y segundo informe (2011 y 2013) participaron un total de 30 organizaciones. Este número se incrementó en el tercer informe (2014) al alcanzar 35 organizaciones y se espera que en el cuarto informe a ser publicado este año (2016) un número mayor de organizaciones rindan cuenta a la sociedad dominicana a través de este canal.

Lo novedoso de esta iniciativa no es que nos digan cuántos fueron sus ingresos y sus gastos, sino que indican cuál ha sido la procedencia de los fondos que manejan, cómo los han invertido y, además, cuáles han sido sus áreas de acción o trabajo.


Cuando estas organizaciones hablan de prestación de servicios y asistencia directa generalmente se refieren a intervenciones en el área de la salud y la educación (un vínculo con políticas sociales fundamentales). Al hablar de cabildeo se trata de abogar por causas como igualdad de género, derecho de minorías y inmigrantes, definición de políticas públicas en el ámbito social, entre otros aspectos relevantes para un desarrollo sostenible.

El mismo informe, al presentar los resultados del quehacer de estas OSC por sectores, evidencia la diversidad en que están involucradas: educación/formación; desarrollo comunitario/local; salud; fortalecimiento de la sociedad civil; derechos humanos/justicia; medio ambiente; generación de ingresos; vivienda/hábitat; participación democrática; ciencia y tecnología; prevención y atención de emergencias; recreación y deportes; discapacidad; cultura y comunicación; trabajo basado en la fe, entre otros.

Otro proceso que se ha llevado a cabo ha sido el Monitoreo de la marcha de la Alianza Global para la Cooperación Eficaz al Desarrollo (AOED), en marzo del presente año, el
Las ONGs están presentes en muy diversos ámbitos.
cual involucró a todos los actores
que forman parte de la misma: Gobierno, actores privados, actores de la cooperación y OSC. Se monitoreado el cumplimiento de los compromisos de Busan para una cooperación al desarrollo eficaz, centrados en consolidar las instituciones de los países en desarrollo, aumentar la transparencia y la previsibilidad de la cooperación al desarrollo, mejorar la igualdad de género y apoyar una mayor participación de la sociedad civil, los parlamentos y el sector privado en los esfuerzos de desarrollo. En cierto sentido, puede decirse que fue un ejercicio de rendición de cuentas del Estado de las relaciones de estos actores en función de los objetivos del Desarrollo Sostenible.

Otro esfuerzo en esta dirección es el proceso en marcha para que las organizaciones signatarias del Pacto Nacional para la Reforma Educativa informen, al igual que las instituciones gubernamentales, sobre las actividades que realizan y que contribuyen a la implementación de los compromisos del Pacto. También existen mecanismos que asumen algunas OSC utilizando el internet y la elaboración de Memorias para presentar resultados a determinados públicos prioritarios.

Un ejemplo significativo es el de las veedurías ciudadanas o veedurías sociales[1] hechas o promovidas desde organizaciones no gubernamentales y que tocan aspectos fundamentales de la Estrategia Nacional de Desarrollo. Por ejemplo, en Mayo del 2013, el Instituto Nacional de la Salud (INSALUD) y el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) presentaron la "Guía de Actuación para Veedores de Salud Sexual y Reproductiva" y la "Estrategia Nacional de Veeduría a las Normas y Protocolos de Salud Sexual y Reproductiva".

En Febrero de ese mismo año, 2013, Alianza Dominicana Contra la Corrupción, ADOCCO, presenta su proyecto de “Veeduría Universitaria”, que tendría como misión observar, vigilar y monitorear la utilización de los recursos de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, UASD.

Aportes que disminuyen

El aporte del Estado a las OSC ha disminuido sistemáticamente en los últimos años, a pesar de que su acción constituye apoyos significativos a la ejecución de políticas sociales a favor de sectores más vulnerables o del empoderamiento social. Por ejemplo, a las ASFL se le asignó el 0.38% del Presupuesto Nacional en el 2008, pero esto fue reduciéndose hasta quedar en 0.32% en el 2013, el 0.325; en el 2014, el 0.308, y en el 2015 cae a 0.297%.

Otro elemento a tomar en cuenta en este tema de la transparencia es la cada vez mayor concentración de asignación presupuestaria en las ONGs registradas bajo el capítulo “Presidencia de la República Dominicana”. La asignación vía este ministerio pasó de 12.7% en el 2008 a 20.1% en el presente año (2015) en términos de recursos, y en términos de cantidad de organizaciones, el 37.5% de las organizaciones que tienen recursos asignados en el Presupuesto lo tienen por esta vía. Este Ministerio no tiene mecanismo de habilitación y, además, puede ser una vía que se preste al clientelismo político y a la falta de institucionalidad. Aquí hay que rascar y rascar con fuerza, porque pica.

Retos de la transparencia y rendición de cuentas

Tal como indicó el informe del Monitoreo del Indicador 2 de la Alianza Global para la Cooperación Eficaz al Desarrollo (Marzo, 2016) “algunos aspectos del entorno legal que deben mejorarse en la implementación: (1) los incentivos fiscales están
José Bretón, José Santiago Reinoso, Sarah Julia Jorge y Milton Tejada C.

establecidos en el artículo 50 de la Ley 122-05. Un reglamento se supone debe facilitarlos. En la práctica, resoluciones lo dificultan y lo hacen casi imposible, especialmente para las ONG con menor desarrollo institucional de menor tamaño; (2) el proceso de habilitación en los ministerios se ha implementado en apenas tres de unos quince ministerios existentes. No se evidencia compromiso para concretizar estos mecanismos que contribuirían mucho a fortalecer la institucionalidad de las OSC, garantizar la calidad del servicio que ofrecen a terceros y las posibilidades de establecer diálogo entre las OSC y los ministerios correspondientes en torno a políticas de desarrollo; y (3) el acceso a los fondos públicos se espera que se haga a través del Centro de Fomento de las ASFL, cumpliendo con los requisitos establecidos en la Ley. Este aspecto todavía requiere ser mejorado y manejado con mayor transparencia e institucionalidad ante las OSC, en temas clave como los mecanismos de asignación y el seguimiento a la rendición de cuentas. El Estado se ha ido fortaleciendo y es necesario ampliar la participación social de las OSC para incluir las academias y los comunicadores para consolidar la democracia dominicana”.

En República Dominicana rendición de cuentas y transparencia constituyen dos polos unidos por un eje: legitimidad. Este concepto es válido tanto para las Organizaciones de la Sociedad Civil como para las instancias públicas.

Los diversos directivos de ONGs consultados expresan que las OSC cumplen con la obligación de rendir cuentas desde el punto de vista fiscal, a pesar de lo cual la imagen pública de las OSC no es buena como conjunto.

Actores políticos y medios de comunicación implementan prácticas de descalificación de las OSC con argumentos tales como que acceden a financiamiento externo o por la naturaleza de su misión. En el caso político, se indica como negativo el hecho del financiamiento externo para aquellas OSC que trabajan con derechos humanos de minorías o hacer labor de vigilancia contra la corrupción o se constituyen en instancias de observación de procesos económicos y políticos, como pueden ser los electorales. En el caso de los medios de comunicación, el descalificativo más común es el de la falta de transparencia en la asignación y uso de los fondos públicos, el que no rinden cuenta, etc[2].

Esto significa que las OSC en República Dominicana enfrentan muchos retos en la mejora de su propia eficacia del desarrollo y la rendición de cuentas. El entorno se muestra propicio. La articulación de prácticas interasociativas mixtas en torno a los Principios de Estambul es un desafío que se ve favorecido por la existencia de espacios democráticos.



1.    Las OSC están llamadas a cumplir la rendición de cuentas exigida por el Estado. Sin embargo, se requiere esforzarse en establecer estándares que sean significativos no sólo desde el punto de vista financiero, sino también de resultados (relativos a la eficacia de su acción) de modo que la inversión de todo tipo que realizan se vea justificada ante los ojos de sus diversos públicos objetivos.
2.    Las OSC pueden sumarse a las iniciativas en curso, como la de Alianza ONG, promoverlas y difundirlas entre sus públicos directos. Se requiere también que las instancias que organizan estas iniciativas, como Alianza ONG, realicen un mayor esfuerzo para que sus resultados lleguen a la opinión pública y para que aquellos analistas que dan seguimiento al tema también den seguimiento a la evolución del mismo a través de los años.
3.    Un tema clave es el de los estándares comunes. En una civilización de la eficacia las OSC no pueden obviar este tema. Tanto gobiernos como agencias internacionales desearían poder comparar resultados. La lógica de inversión-resultados ha permeado todo quehacer institucional, es necesario trabajar para que esa lógica se aparte de la gestión de las ONGs en República Dominicana.
4.    Sin embargo, en la creación de estos estándares desde las propias ONGs, sería conveniente tomar en cuenta la diferenciación en desarrollo institucional de las ONGs, dada que a algunas no cuentan con los recursos humanos suficientes para ceñirse a algunas normativas sugeridas en otros países.
5.    Está pendiente una discusión amplia sobre qué significa recibir fondos públicos. Para algunos, muchos de los fondos de organismos internacionales son también fondos públicos. Otra arista de este aspecto, es el financiamiento de algunas OSC vía el 5% de la Renta Neta Imponible, lo cual se hace difícil en República Dominicana, pero deben considerarse como fondos públicos para aquellas OSC que están recibiendo fondos por esta vía, ya que se trata de impuestos dejados de ingresar al fisco por una disposición impositiva.


1.    El establecimiento de estándares comunes para la rendición de cuenta, más allá de lo financiero, facilitaría a las ONGs su labor de evaluación y de planteamientos de nuevos proyectos. En ese sentido, el Centro de Fomento de las Asociaciones sin Fines de Lucro podría encabezar, junto al Consejo, el establecimiento de estos estándares. Esto no sustituye las iniciativas desde las propias ONGs, sea como instituciones individuales o como colectivos.
2.    Es necesario que la rendición de cuenta no se agote en una formalidad sin seguimiento ni consecuencias. Desde la Cámara de Cuentas de la República Dominicana se ha reiterado en diversas ocasiones el no cumplimiento de la rendición de cuentas de OSC que reciben fondos públicos, pero no se han reportado las consecuencias de esta carencia.
3.    Se acepta como importante la rendición de cuentas de los fondos públicos recibidos, pero igualmente importante es la transparencia en la asignación de dichos fondos de modo que las OSC y la sociedad como tal sepan en base a cuáles criterios un gobierno asigna determinadas cantidades a determinadas instituciones. En los últimos dos años se ha avanzado al publicar los Términos de Referencia, pero este aspecto debe ser fortalecido, de modo que la legitimidad también se fortalezca y que la desconfianza en la asignación disminuya.


                                                                      


[1] . Veeduría social entendida como un proceso de participación en donde la población demanda y exige responsabilidad en el cumplimiento de los compromisos, competencias y funciones del gobierno y de instituciones privadas que actúan en el espacio público.
[2] . Aunque no es objeto de este informe, los relatos publicados en los medios generalizan lo que pueden ser casos particulares. Esto no significa que las OSC no deban prestarle atención.

No hay comentarios: