Desde mi estudio / Es cuestión de ombligo...

Desde mi estudio / Del optimismo a la frustración

Su voz estaba llena de desencanto y amargura. Navi reaccionaba a nuestra afirmación de que la gestión actual (2004-2012) del Presidente Fernández debe ser evaluado a la luz del primer gobierno (1996-2000). Los dominicanos no esperamos menos de lo logrado en aquel cuatrienio. Sin embargo, parece que no será así.

Una palabra caracteriza actualmente la institucionalidad y la marcha de la nación: involución.

Mi amigo Navi comentaba, a través de la línea telefónica, que el Presidente Fernández señaló que no hay recursos, que son tiempos difíciles y en donde se impone la austeridad.

“Milton, no parece ser el mismo Presidente que dispuso la construcción de una obra municipal con valor superior estimado a los 500 millones de dólares y que terminó costando sobre los mil millones de dólares. Es decir, se toman los recursos de 125 municipios para tratar de resolverle el problema a un solo municipio.

Las leyes, esas que marcan la pauta de lo que pretendemos ser institucionalmente, se han constituido en auténticos “pedazos de papel” que pueden ser modificados a la conveniencia del momento o, simplemente ignoradas.

Es un pedazo de papel que se ignora la Ley del 10% para los Ayuntamientos. Es un pedazo de papel que se ignora la Ley que otorga el equivalente al 4% del PIB a la educación.Parece ser un pedazo de papel que se ignora el establecer de modo transparente el precio de los combustibles.

En una situación difícil, el Presidente autoriza una remodelación del Palacio de Bellas Artes de corte “faraónico”.

Se fortalece la informalidad. Hay un millón cuatrocientos mil empleos formales y un millón ochocientos mil empleos informales. ¿Por qué? Es que el costo de la formalidad casi nadie lo soporta. Las tasas impositivas son insoportables. Aplastan, aplastan y aplastan.

Se plantea que opine todo el mundo, pero se burlan de toda opinión disidente. Es como decir: te callas la boca.

Subieron la tasa de interés porque era necesario tapar el enorme agujero provocado en el proceso electoral. Ahora hay que bajarla a la carrera. Una reelección que costó mucho más dinero del que aparentemente costó y que entregó áreas del Estado por los próximos uno, dos o tres años.

La situación actual es el resultado de una visión de ejercicio del poder, no de una situación de crisis.

Estamos jugando con la democracia y con la paciencia de la gente”, expresaba Navi.

La verdad que me duele ver a mi amigo Navi pasar del optimismo a la frustración. Yo, Desde mi Estudio, la verdad que creo que se trata de una cuestión de ombligo. La capital es el ombligo del país. El PLD es el ombligo de la cosa pública. El Presidente Fernández es el ombligo del PLD. Y parece que no hay cosa más bella que el ombligo…