sábado, agosto 31, 2013

Mi Diario / Escribir la verdad

31 de Agosto, 2013
Escribir la verdad es un arte
El 10 de Junio de 1988 (es decir, hace ya 25 años) escribí algunas reflexiones en mi diario que hoy comparto (probablemente no comparto todas mis aseveraciones de entonces porque, como Walt Whiman, puedo decir: "soy grande, puedo contradecirme")...
Bertolt Brech, en un artículo de 1935, habla de "cinco obstáculos apra escribir la verdad":

  1. Tener el valor de escribirla;
  2. La perspicacia para reconocerla;
  3. El arte de hacerla manejable como un arma;
  4. El escoger en qué manos se hará eficaz;
  5. La astucia para propagarla.


Sobre el valor de escribir la verdad, nos dice Brench: "...resulta muy arduo no doblegarse ante los poderosos, y en cambio es muy provechoso engañar a los débiles"... "Hace falta valor, en estas épocas, para hablar de cosas tan vulgares y pequeñas como la comida y la vivienda d elos obreros, en medio de un gran vocerío que proclama que lo principal es el espíritu de sacrificio".
Hace falta valor, BB, por lo que tú dices y otras cosas. Hace falta valor, incluso, para reconocer la miseria de no saber la verdad (si es posible entre nuestros intelectuales este acto de "heroismo"). Hace falta valor para decir la verdad y saber que militamos, muchas veces, en verdades a medias (incluso con todas las posibilidades de ser una gran mentira).
En cuanto a la perspicacia de reconocer la verdad... hoy no es fácil encontrarla, BB. No es fácil tampoco saber qué verdad vale la pena decir, de qué verdad hacernos "militantes". Estamos llenos de "viejas supersticiones, de prejuicios ilustres y bellamente formulados en la antigüedad", esto nos impide "hacer manejable las cosas de este mundo".
Así, por ejemplo, pienso yo, cuánto nos cuesta no aferrarnos a viejas explicaciones sobre los conflictos sociales, cuánto nos cuesta ver aparecer y desaparecer "formaciones" sociales o percibir pueblos en formación o conformación permanente... Cuánto cuesta amar desde las entrañas y con respeto absoluto -incluso respeto a sus equivocaciones- a nuestra gente, a nuestro pueblo.

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