En busca de una marca
Una marca personal se define como la percepción a la
que aspiro tenga la gente sobre mi como persona y como profesional. Requiere de
gerencia para producir esa percepción.
La reputación es el grado de conocimiento, prestigio
o la opinión que la gente tiene sobre una empresa, un producto o una persona
(“marcas).
La creación de una determinada reputación on line
requiere comunicar sistemáticamente lo que hacemos, lo que
ofrecemos, nuestros temas de interés profesional, los proyectos a los que nos
dedicamos, lo que logramos y lo que dicen otros sobre nosotros.
Juan Carlos Jiménez[1]
señala que ocuparse de la marca personal permite estar consciente
sobre lo que dices y haces en las redes sociales y sus posibles consecuencias y, además, tener un mapa de
trabajo para alcanzar mejor tus metas y objetivos personales y profesionales. Lo cual te conduce a contar ventajas competitivas para tu desarrollo profesional.
La reputación que tenemos afecta positiva o
negativamente todas nuestras relaciones personales, laborales, sociales… en
fin, nuestras oportunidades en diversos campos.
Y en
las redes sociales
Publicamos en nuestras cuentas de redes sociales. Es
la base para la construcción de nuestra marca personal. Para iniciar, incluir los aspectos básicos de
tu “identidad de marca”: qué eres o qué haces, tus temas de interés o
especialidades, qué te distingue como persona… Por ejemplo, mi perfil en
twitter expresa:
“Le creo a Jesús,
periodista, investigador social, poeta, estratega de comunicación y, sobre
todo, esposo de Ysabel y padre de 4 jóvenes. Mi pasión: el lenguaje”.
Son las facetas que valoro de mi como persona y como
profesional. No siempre mi comunicación a través de esta red se corresponde con
esta descripción. Además, puede resultar un poco amplia pues incluye elementos
personales (cristiano –le creo a Jesús-, esposo, padre, poeta) con
profesionales diversos (periodista, investigador social, estratega de
comunicación).
No olvidar que la reputación no se construye sólo en
base a lo que expresamos en las redes sociales. También está lo que hacemos
fuera de internet y ambos aspectos se interrelacionan y afectan mutuamente.
Para tus públicos, no debe haber diferencia entre lo que haces dentro y fuera
de la Red. Esto se llama coherencia.
Define con claridad tus valores, tus gustos personales, tus pasiones (o áreas
de interés).
Arrancando
- 1. Define la percepción que espera que tengan de ti los demás a través de la Red, como persona y como profesional.
- 2. Evalúa si lo que defines se corresponde con tus prácticas o conductas (coherencia).
- 3. Define los valores que marcarán tu comunicación de marca y que se corresponden con tus pautas de conducta.
- 4. Establece objetivos tanto en la práctica como en la Red para alcanzar tu meta última de percepción.
- 5. Establece un “plan de acción”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario